Sic Sac, por: M.A. Elda Clemente Reyes
Hoy 9 de marzo de 2020 las mujeres nos ausentaremos de los centros
de trabajo, tiendas departamentales, escuelas, y otras actividades, les tocará
a los hombres intentar comprender y sumarse. Una fecha que no pasará
desapercibida para algunas empresas, el gobierno federal, estatal, municipal y
hombres con la responsabilidad de ejercer el poder para garantizarles seguridad
y darles su lugar y su valor.
El paro nacional #UnDíaSinMujeres simboliza un parteaguas
social en el país que creció por los últimos hechos de violencia contra mujeres
y escaló a la esfera política por un error mediático que enardeció las redes
sociales, aunado con un discurso de las autoridades que no supieron comunicar y
contextualizar correctamente esta problemática.
No es la manifestación lo que pone en juego la percepción ciudadana
sino el alcance de las declaraciones y actitudes contrarias a su verdadera
esencia. La buena relación del gobierno federal con las mujeres, es importante
para no poner en riesgo su permanencia sin el aval femenino.
Recordemos que, de los casi 125 millones de habitantes en México
51.1 por ciento son mujeres y 48.9 ciento son hombres, de acuerdo al INEGI.
Esta cifra nos da una idea de su influencia en la toma de decisiones y en las
pasadas elecciones 49 por ciento de ellas, votaron por Andrés Manuel López Obrador,
mujeres de nuestro México.
Una cifra nada despreciable si pretende seguir gobernando con
el visto bueno de las mayorías. El presidente AMLO debe ser más sensible y cuidadoso
en sus líneas discursivas al momento de referirse a los feminicidios o
cualquier otro tema dirigido a las mujeres.
Provocar un malentendido o un descontento mayor le podría
costar no solo #UnDiaSinMujeres sino el resto del sexenio sin su apoyo por
sentirse heridas, lo que necesitan las mujeres es su respaldo. Su reciente caída
en su popularidad al 57.1 por ciento, de los cuales 60.3 por ciento, de los
encuestados fueron varones y 53.3 por ciento mujeres, revela un dato
interesante al sumarse el tema de los feminicidios a los de la agenda nacional.
La postura del presidente frente a este movimiento al verlo
como un agravio a su gobierno, no fue replicado por políticos y empresarios que
saben perfectamente que el empoderamiento femenino es una lucha de antaño que
hoy, tendrá su máxima expresión frente a los que siguen pensando que las
mujeres solo servimos para seguir dictados preestablecidos.
Se espera que el paro #UnDiaSinMujeres logre la aplicación de
todo el peso de la ley, hacer conciencia que las mujeres complementamos el
desarrollo del país, y garantizar certeza jurídica contra todo tipo de ataques,
evitando la impunidad o la libertad de los agresores.
