Por Armando Ríos Peter
Arrancó la recolección de firmas para quienes pretendemos ser candidatos independientes a la Presidencia de la República. Muchos son los obstáculos que han impuesto los partidos buscando desalentar la participación ciudadana, con el fin de mantener su obsoleto y ofensivo sistema. ¡Pese a sus intentos, estamos listos para alcanzar la meta de un millón de firmas, llegar a la boleta y construir un México con justicia!
A pesar del difícil comienzo, hay grandes expectativas. Estas candidaturas presentan la gran oportunidad de llenar de oxígeno la vida democrática del país, pues pueden convertirse en el contraveneno de aquello en lo que derivó la partidocracia. Hoy tenemos un sistema político en el que los partidos se clonaron en sus trampas para hacer campañas y en las mañas para gobernar. Su actuar ha mantenido y profundizado la corrupción, la inseguridad y la desigualdad de oportunidades.
Seguramente habrá quienes critiquen la presencia de 85 aspirantes a la Presidencia de la República. El número, sin duda, es alto, pero puesto en perspectiva, no sólo demuestra el interés de la ciudadanía por participar por esta ruta, sino que se garantiza la ruptura del tan nocivo monopolio de las cúpulas partidistas. Adicionalmente, la presencia de 185 aspirantes a diputados federales y otras decenas más a senadores de la República abren alternativas importantes para oxigenar y fortalecer también al Poder Legislativo.
Las candidaturas independientes significan una evolución fundamental del sistema político. A lo largo de dos décadas, las cúpulas partidistas impusieron sus intereses por encima de la ciudadanía. Ahora, la ruta independiente abre la oportunidad a todo aquel que quiera participar en política, para que pueda hacerlo sin depender de los terribles intereses que se adueñaron de los partidos políticos mexicanos.
Yo no veo la presencia de muchos aspirantes como un problema. Por el contrario, cada uno de ellos tiene la oportunidad, y también la obligación, de presentar propuestas innovadoras a lo largo y ancho del territorio nacional, de esmerarse por hacer política diferente, de inspirar a segmentos de la sociedad que hoy se mantienen apáticos, de compenetrarse directamente con los habitantes del país y diferenciarse de lo que hasta hoy han hecho los partidos políticos. Sin duda alguna, esto representará una alternativa para repensar la política y la forma en que funciona el país.
Por lo pronto, la simple existencia de las candidaturas independientes ya abrió la posibilidad de elevar la valla y el perfil de la campaña del 2018.
Ciertamente, estas candidaturas se consintieron con un piso no parejo frente a los partidos políticos, que llenaron ese proyecto de piedras, trabas y dificultades para desanimar a los buscadores. Pero éstos no contaron con el hartazgo de la gente, que se ha manifestado de diversas maneras en los medios a su alcance, especialmente en las redes sociales. El terreno es fértil, pues hoy un 94% de la gente desaprueba al conjunto que representan PRI, PAN, PRD, Morena, etcétera.
Por eso, junto con miles de hombres y mujeres en todo el país, hemos decidido abrir una nueva opción, buscar la Presidencia de la República como parte de esta Ola Independiente.
Vamos a convocar a millones de mexicanos a escucharnos, a pensar juntos las soluciones que México necesita. Vamos a articular un equipo con mujeres y hombres de todos lados, dejando atrás las cuotas y los cuates que han imperado hasta ahora, y cambiarla por un equipo de mexicanos comprometidos que nos entrelacemos en este caminar. Vamos a debatir ideas con todos los independientes y a tender puentes que promuevan la unidad, contra el verdadero contrincante de esta elección que son los partidos políticos.
Hoy arranca la cuenta regresiva para contactar y convencer durante los siguientes cuatro meses a un millón de ciudadanos que nos brinden su apoyo y su firma. Nuestro equipo representa experiencia, preparación y honestidad para enfrentar este reto. Estamos listos para estar en la boleta e irrumpir en el desesperanzador escenario que han armado los partidos. ¡Vamos por la Presidencia de la República para construir juntos un México con justicia y armar el futuro que nos merecemos!
