Con el dedo en la llaga, por: Yazmín Rodríguez Galaz.
Muchas dudas han surgido, particularmente,
en el seno de la burocracia federal de Yucatán en donde laboran cerca de 22 mil
trabajadores –entre gente sindicalizada y de confianza- en las 62 oficinas y
dependencias públicas del gobierno federal a raíz del triunfo de Andrés Manuel
López Obrador candidato de Morena, PES y PT, debido a que todavía no se
clarifica cómo y de qué manera se hará la ya anunciada descentralización.
Tampoco se sabe mucho acerca de lo que
será la llegada o mudanza de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos
Naturales (Semarnat) a Yucatán y que implicaría que todos aquellos que laboran
en esa institución, tengan que cambiar su residencia hasta estas tierras. Y no
se sabe tampoco qué pasaría con quiénes finalmente decidan no hacerlo.
Al parecer, fue demasiado pronto el hecho
de que el ganador de la contienda electoral diera a conocer –a medias- algunos
de los proyectos que implementará una vez que asuma la Presidencia de la
República el próximo 1 de diciembre, pues no solo generó expectación, sino
también dudas e incertidumbre.
Y cómo pintan las cosas y ante el triunfo
arrollador que obtuvo Andrés Manuel López Obrador y la mayoría de Morena en el
Senado de la República y la Cámara de Diputados, es seguro que todos esos
cambios o propuestas finalmente logren realizarlos. Por lo pronto no se les
observa oposición alguna y cuando menos en los próximos tres años podrán
hacerlo sin ninguna resistencia.
Por otro lado, en diferentes dependencias
del sector público federal, hay personal especializado que tardó años en
profesionalizarse para trabajar en ciertas áreas, como es el caso de la CFE,
Conagua, CONAFOR, entre otras.
Por tanto, no será tan fácil el relevo de
personal no más por decreto, además no
hay que olvidar que desde hace tres sexenios, en el servicio público federal se
aplicó el servicio profesional de carrera que obliga a concursar plazas de
manera específica y por tareas muy concretas. Aún se desconoce cómo serán
operados y aterrizados todos esos aspectos por los nuevos jerarcas del poder
que llegarán a gobernar al país a partir del 1 de diciembre.
Un conocido y destacado panista yucateco
decía recientemente, “El pueblo le dio todo el poder y la legitimidad a Andrés
Manuel López Obrador y Morena para gobernar, pero esto no es un cheque en
blanco para que hagan lo que quieran y vengan a desordenar y revolver la casa”.
Y remató: “No se puede menospreciar las
instituciones del país ni todo lo que se ha hecho en México en las últimas
décadas, es labor de años…”. Había hartazgo de la gente hacia la corrupción y
disgusto por decisiones erróneas que afectaron la economía de miles de
mexicanos, pero no todo fue malo, hay cosas, programas, infraestructura,
inversiones, etcétera, citó.
Por tanto aún falta por ver muchas de las
cosas que a medias se han anunciado, no solo la descentralización de las
dependencias del gobierno federal, sino la misma creación de las coordinaciones
estatales de Desarrollo Social y bajo qué figuras legales fungirán.
Por otro lado, será significativo ver cómo
se continuará el llamado “pacto federal” y la soberanía de estados y
municipios, ya que se vislumbra que el nuevo gobierno emanado de Morena,
pretende actuar rápido y de manera contundente en todo el país.
Incluso considerando o no –al menos así se
observa por lo pronto- lo que digan o piensen los gobiernos de los Estados,
bueno, al menos los que no vengan de la filiación “morenista”.
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De
golpe y porrazo
Tremendo “apagón” ocurrió en días pasados
no solo en municipios de Yucatán y Mérida, sino hasta en Cancún y algunas zonas
de Campeche. Y ¿qué creen? Como siempre, la paraestatal guardó hermetismo y
silencio en torno a las causas que provocaron la falta de suministro eléctrico
por más de 45 minutos y en otros casos, hasta de una hora.
Está visto que a esa dependencia poco o
nada le importa si sus usuarios quieren saber qué pasó y por qué en el servicio
que pagan todos los días.
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Después de la campaña y el interés por
andar publicitándose como candidatos, quienes resultaron ganadores y hasta los
que no, prefirieron sustraerse y “guardarse” durante varias semanas ante los
ojos de los electores y ciudadanos en general.
En el caso del gobernador electo Mauricio
Vila Dosal y del también alcalde electo Renán Barrera Concha, del mismo
blanquiazul, decidieron irse de vacaciones por separado y cancelar agendas
hasta nuevo aviso.
Un “secreto” resultó para muchos, el
destino que eligieron para vacacionar con sus familias y estrictamente en la
intimidad.
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Pues de buena fuente, se nos informó que
el candidato del PRI-PANAL-PVEM, Mauricio Sahuí Rivero quien no ganó la
elección del pasado 1 de julio, se anda reuniendo a puerta cerrada con sus
seguidores y colaboradores.
Al parecer –comentan- Sahuí Rivero tendría
interés en buscar –de nuevo- el liderazgo del PRI estatal. Obviamente que ya
hay muchísimos priistas que se opondrían a que esto ocurra bajo el argumento de
que; “Sería pésima lectura para los priistas, sobre lo que queda por hacer en
el tricolor”. Lo pasamos al costo.
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De
esto y más estaremos pendientes.
Recibimos
correos con firmas en yazrodrigezg@gmail.com
