Por Genoveva Castro Manzanilla
Bueno más que interesante se va calentando el ambiente político con miras al deseado 18. Varios aspectos de la semana que van dando diseño de lo que se esperaría, incluso, en ciertas definiciones y seguimiento del intento por conservar el control político nacional. Enrique Peña Nieto, en su función de priista, se hizo notar en un estilo conocido, de ese PRI que no duda en poner a sus fichas vigentes para tener mayoría en los tiempos claves de acuerdos finales.
Se observó la inclusión destacada de varios de sus cercanos, como Aurelio Nuño y Luis Videgaray, quien, en realidad, como se sabe, sigue esperando tras bambalinas. Fue desglosado el perfil de quienes forman parte del Consejo Político, prácticamente a modo presidencial con la anuencia, desde luego, de los jerarcas estatales y gobernantes de las entidades del país.
Destaca la decisión de utilizar las armas clásicas del partido que ha llevado líneas directas ya conocidas y que ahora con esta convocatoria territorial se confirma, una vez más. Algunos opinan que han regresado algunos conceptos de antaño, esos que quienes poseen el poder no ceden nada ante sus adversarios de su mismo partido. Quizá, ese ejemplo de Peña Nieto, motive a algunos o muchos gobernantes a imitar aspectos en las zonas de operación nacional. Veremos, se dejó un ejemplo que podría ser imitado. Hay quien se atreve a decir, que don Carlos Salinas podría estar asesorando temas netamente políticos, es cuestión de tiempo, para confirmar.
El cacareado tema que descansa en el sentir de millones de mexicanos en el concepto de corrupción, sigue latente, aunque en casos precisos se han minimizado. Por otra parte, el PRI está trabajando bajo un esquema de enfrentar situaciones muy a la vista de las que son necesarias darle la atención especializada. Son tiempos de definiciones en estas previas y las decisiones tomadas, habría que ir viendo su evolución que podrá ayudar o abonar para bajar puntuaciones. Así que, pendientes todos.
En el estado trabajador de Yucatán, destaca de nuevo, la figura del emblemático titular del Poder Ejecutivo Estatal, Rolando Rodrigo Zapata Bello, quien revisando los aspectos que le muestran en lo financiero oficiales y no; se da a la tarea de ir evaluando también el avance de las obras programas para su informe de gobierno y para el cierre de éste último tercio de su mandato constitucional.
No hay duda de los buenos resultados que va a entregar. Su labor objetiva, es mayor que la mediática. El ciudadano conoce de las obras y recibos que se van construyendo o bien que se han alcanzado de una manera real. Las mediaciones nacionales de fuentes propias han estado en la constante de otorgar calificativos gratos al interior del equipo zapatista.
Hay las voces, desde los agentes de los palacios, que en estas fechas se deberá estar utilizando los conceptos de que hay complicaciones, escases económica, pendientes por resolver, es decir, demostrar una austeridad al exterior con respuestas oficiales. Parte del objetivo es que no se piense que en otro sentido pueda haber bonanza en las arcas gubernamentales o bien en las casacas de los cercanos con utilización de los dineros para complementar objetivos. Trabajando, por el presente y futuro.
Se resalta que la agenda de Zapata Bello está estructurada para abrazar los mayores sectores posibles en la dimensión propuesta-objetivo. Otra razón, fuera del contexto institucional de gobierno; es que, desde los apartados requeridos, don Rolando Rodrigo deberá estar abonando a las figuras, zonas, completos y extensiones políticas ante el 18. Todo gobernante desea dejar en su silla a otro de su mismo partido, con todo y alianzas, negociaciones y demás consensos, pero de su partido. Al menos en el caso de Mérida, en el primer intento no se logró, ganaron sus amigos del PAN. ¿Volverá a suceder en el 18?
Y, una destacada integrante de los agentes de los palacios, confío que, en una supuesta plática informal, fuera de horario de trabajo el Secretario de Educación y una de las mayores fichas de Zapata Bello como lo es Víctor Edmundo Caballero Durán le manifestó que va con todo por llegar a la candidatura al gobierno de Yucatán. Que está realizando su parte con el mejor de los esfuerzos, aunque reconoció, según trasciende, que le faltan sectores y líderes a los que no les ha dado espacio de participación, por la diferencia de su formación ideológica y sector de estudio.
Interesante será, que no le vayan a estar asegurando esos personajes que ya incluso están en la cima de gobierno en sitios puntales al reencontrase, pues le ofrecieron obtener la candidatura por Mérida y no lo lograron. Ahora, tendrá que tener cuidado, esta jugada central va de acuerdo a su perfil y podría hacer una excelente labor en bien del Yucatán, que, en magníficas condiciones generales, seguramente, dejará su amigo Rolando Rodrigo.
Ya, aunque no se exprese libremente, las previas al 18, están con gran empuje en la entidad. Por todos lados y en todos los partidos políticos están en los acercamientos, alianzas, pero, lo que aún no saben hacer, según uno de los mayores agentes de los palacios es el sentido amplio y efectivo de la inclusión. Se guardan en sus, miedos y ambiciones.
Yucatán se destaca por su vida democrática. Por esos líderes con valores. Por esos sectores que en su tiempo se acercan a sus reales intereses. Las alianzas de motivos y razones siempre están en todas las negociaciones y procesos selectivos y se extienden a las bonanzas del placer de gobernar. Ahora vemos, con gusto, desde luego, esas manos cercanas de un empresariado entregado, a colaborar, y trabajar con el fin de cuidar sus inversiones y fuentes de empleo. De lago de gobierno se aprovecha esa coyuntura para lo conducente que también es muy amplio el concepto de cooperación bilateral. Todos contentos, y, eso, es bueno. Pendientes todos.
