Sic Sac, por: M.A. Elda Clemente Reyes
La detención del secretario de Defensa Nacional en el sexenio de Enrique Peña Nieto, Salvador Cienfuegos Zepeda, por la Agencia para el Control de las Drogas (DEA), abre un capítulo más de corrupción infiltrada en los altos mandos del ejército, quien presuntamente ofreció protección e impunidad a narcotraficantes y delincuentes, a cambio de sobornos.
La investigación del Tribunal Federal en Nueva York, incluye cuatro delitos de tráfico de sustancias prohibidas y lavado de dinero, contra el militar en retiro. Si la Corte Federal de Nueva York, logra ponerlo tras las rejas, la narcopolítica podría quedar al desnudo.
El ex funcionario castrense es otra pieza del ajedrez en el tablero del expresidente Enrique Peña Nieto, que se suma a la detención de Genaro García Luna, secretario de Seguridad Pública, en el gobierno de Felipe Calderón.
“El Padrino” como se identificó a Cienfuegos en los audios interceptados por la DEA es el segundo oficial mexicano en ser arrestado, luego de que en 1997 fue capturado y condenado a 40 años de cárcel el general Jesús Gutiérrez Rebollo. De confirmarse oficialmente que fue detenido por tráfico de estupefacientes, veremos qué otros nombres de militares y exfuncionarios salen a relucir. Hasta dónde se extiende la red de complicidades que vuelve a empañar la lucha de México contra el crimen organizado fraguada ahora desde el Ministerio de Defensa.
Aunque las autoridades judiciales en México no tienen bajo sospecha al exsecretario de la milicia, otra vez la DEA se mete hasta la cocina con lupa y deja mal parado al país a nivel internacional. Si alguien piensa que Salvador Cienfuegos, es el único que está siendo investigado, se equivoca, en la Fiscalía de Nueva York, se barajean averiguaciones que poco a poco irán saliendo a la luz pública.
En algunos estados es un secreto a voces la influencia de grupos delictivos y los “favores” que conceden y reciben para “trabajar” con impunidad por el territorio mexicano hacia Estados Unidos.
La Sedena donde los altos mandos presumían de ser intocables, fue cuestionada en algunas ocasiones durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, por violaciones a los derechos humanos, desaparición forzada y omisión en el caso de la desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa, Guerrero. Justo cuando Cienfuegos, fungía al frente de esta institución.
La “Operación Padrino” es un hecho histórico que, al mismo tiempo, favorece la lucha contra la corrupción del presidente Andrés Manuel López Obrador, y políticamente es otro golpe para la administración peñista, que no termina de sorprender por sus presuntos nexos con narcotraficantes.
Nuevos partidos
Redes Sociales Progresistas (RSP), Fuerza Social y el PES lograron su registro como partidos políticos luego de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, analizara las impugnaciones interpuestas. En Campeche cuentan con más de tres mil militantes y alguno que otro aspirante ya está en busca de un acuerdo con dirigentes estatales de estas organizaciones para abanderar sus siglas en 2021.
No podrán hacer alianzas y de no alcanzar el 3 por ciento de la votación, tendrán su debut y despedida. En la boleta electoral del próximo año aparecerán 10 logotipos con distintas ofertas partidistas. Dependerá de los campechanos elegir las mejores opciones
