Por: Cristina Padín
En casa celebraban algunos festejos propios de otros
lugares. Lo hacían porque eran muy respetuosos y cultos.. y porque habían
vivido en Estados Unidos y en Israel y en Holanda..
Por ejemplo aquella tarde sombría del 28 de noviembre la
dedicaban a DAR…
Hay una celebración bella sobre ese concepto y la joven que
trabajaba en una escuela la había comentado en el aula.. y juntos a los
pequeños dieron color a un calendario.
De Adviento. Y lo regalaron al Hogar de Ancianos..
Los medianos de los chiquillos recogieron alimentos: cosas
exquisitas, mermelada, uvas, chocolate con almendra, castañas.. y lo entregaron
a las monjas en el convento.
Para ellas y para personas necesitadas.
Los pequeños dieron cada uno un euro. De los que usaban para
sus gastos. Compraron con la cantidad postales navideñas para la Escuela
Taurina y para el hospital..
Dar es precioso!
Los mayores de los chiquillos siempre hacían algo en estas
fechas. Y contaban con mucha ayuda. A algunas casas ya no iban nunca. De los
que daban palabras huecas ya no querían nada.
Dar: un regalo al alcance de personas con corazón
Hay muchas personas con corazón. Y muchas sin él. Las
primeras son grandes!
A las personas que siempre dan lo mejor de sí mismas.. dar
es amplio, siempre hay algo que se pueda ofrecer
A las Escuelas Taurinas
A los toreros que hacen cosas solidarias
A Luis
A Raquel, cumpleañera ayer
A Doda, cumpleañera hoy
A Holanda, mi país de nacimiento
A Israel, país que me fascinó.. y a mi fabuloso guía
A las postales de Navidad.. ando buscando algunas ideales
para JM, F, I…
Y para A, JC, M, B.. a los que dedico este relato por su
bondad
Y a valientes gallegos