Fue la última canción que escuché allí. Let the music play, de Barry White. Después, cerré la puerta de la habitación, y fui consciente de que empezaba aquella nueva vivencia. Salí del hotel relajada y feliz.
Era agosto, final de agosto, era verano…
Iba a empezar el Camino de Santiago, el camino francés. Escuchando en mi ipod Cai, de Niña Pastori, me dirigí al punto de partida. Iba a caminar sola durante más de treinta días. Mi música, mi fe, mis pasos, mis pensamientos…
…y yo!
Sonreí. Y, sin más, eché a andar. Ya sonaba la dulce voz de Pablo Lòpez, El incendio. Iba sin prisa, mi promesa y mi esperanza y yo. Pensaba llegar el 26 de septiembre. Abrazar al Santo, ir a Finisterre. Ir a rezar a Santa Minia..
Y volver a Madrid el 28, para ver torear al mago y para ir el domingo a los toros en Las Rozas… sonaba Rosario, Gloria a ti…
Dedicado a los artistas mencionados
Al Camino de Santiago
A cada persona caminando…
A Luis y a su familia
A mi mago
A los toros en Las Rozas
A mi amiga Patricia: feliz cumpleaños, gran camino has hecho, querida, y has ganado!
A mi cantante favorito
Y a la música